viernes, 4 de diciembre de 2015

Monsoonstole, chal de ganchillo


De unos meses a esta parte, conforme voy haciendo más y más labores, me he ido dando cuenta de cuánto hay que no sé y de tantísimo que me queda por aprender en esto de las labores con lana, por ello y porque en internet hay magníficos artistas que comparten o venden sus diseños, me he propuesto tejer todo lo que encuentro... diferentes proyectos, diferentes puntos, diferentes medidas.

En mi empeño por buscar cosas bonitas, encontré una cuenta en instagram que me encantó, se llama @thelittlebeenz, y hoy quiero enseñaros el patrón que compré. El chal se llama Monsoonstole, y según su diseñadora cuenta, está inspirado en los saris que visten las mujeres en India. Si visitáis su perfil, podréis ver que los colores originales del diseño, así lo sugieren, pero en mi caso, me decidí a tejerlo en unos colores más adecuados a la vestimenta que llevamos aquí.

Casi por casualidad, en una tienda de lanas que visité por primera vez, encontré esta gama de tonos rosados, que combiné con gris y blanco, de la marca Valeria di Roma. ¿A que son preciosos? La composición es lana 100%, y a pesar de que el punto es bastante calado y la lana no es demasiado gruesa, tengo que confesar que cuando la llevas, da un calorcito muy agradable.

El diseño cumplía todos los requisitos que yo buscaba para mi siguiente labor, que me permitiera aprender cosas nuevas, que fuera útil, y que fuera bonito. Como veréis en las fotos que os muestro, así es...




A continuación os hablaré un poco del proceso de bloqueo del chal. Mirad, para este chal que ha resultado algo largo, he utilizado un colchón tapizado en una tela de rayitas que me ha resultado de lo más útil para darle la forma recta a los bordes.


Le pedí a Elena que sacara ella las fotos del proceso de bloqueo ya que yo tenía las manos ocupadas en el trabajo, y ha resultado ser una artista de la fotografía, pues con solo once años mirad que fotos tan originales y delicadas ha sacado







Así es como quedó tras el proceso de bloqueo, bien recta, algo importante en este diseño que al tener diferentes tipos de puntos, variaba la anchura en algunos tramos.

 


Si acudís a ver el diseño original, os daréis cuenta de que no es exactamente igual a aquel, ya que yo le hice alguna modificación, alargándola un poco más y añadiéndole una puntilla en ambos lados, ya que el original solo llevaba puntilla en uno de los extremos.


Y bien, ¿qué os parece? ¿a que es preciosa? Tengo que reconocer que la combinación de colores ha sido un gran acierto. Os presento a mi madre, con su estola puesta.



Ella está encantada, le gusta mucho y ya ha comenzado a usarla. Me ha contado que en el autobús algunas señoras le dicen lo bonita que es y eso le da alegría. Yo también me alegro, ha valido la pena el trabajo una vez más, he aprendido sobre puntos nuevos, tejidos nuevos, el proceso de bloqueo... en definitiva, otro trabajo bien hecho y más satisfacción para mi y mi mamá.

Si os animáis a tejer la Monsoonstole, en el siguiente enlace podéis encontrar el patrón.

jueves, 29 de octubre de 2015

El césped, de otoño a primavera


En el césped, como en todas las plantas se nota el paso de las estaciones. En verano está verde y brillante, crece con fuerza y aporta frescor al jardín. Tiene el inconveniente de que hay que cortarlo con frecuencia, pero compensa cuando ves a los niños correr y jugar sobre él.


Luego llega el otoño y el ritmo de crecimiento baja, se siega menos a menudo, se llena con las hojas de los árboles que comienzan a soltarla y el aspecto es diferente. Me encantan los colores otoñales del jardín.


En invierno la hierba deja de crecer, según la variedad de gramínea puede que incluso se vuelva amarillento o marrón. No está bonito, pero tampoco es un inconveniente porque no se usa tan a menudo. En cambio, el descanso del césped en invierno también supone un descanso para el jardinero hasta la siguiente primavera que volverá a despertar y a comenzar de nuevo su ciclo.

martes, 20 de octubre de 2015

Calabaza de Halloween, tutorial

Como pasa el tiempo ¿verdad? Hace nada que terminaron las vacaciones, y ya estamos a punto de celebrar Halloween un año más. Yo sinceramente hasta que tuve a los niños no había celebrado esta fiesta nunca, pero ellos la celebran, les gusta disfrazarse, salir a la calle con los amigos y en definitiva... celebrar. Como la vida ya te da suficientes disgustos, creo que hay que aprovechar cualquier circunstancia para juntarse con aquellos que más te apetezca y celebrar lo que sea, que estamos juntos, que estamos contentos, que estamos vivos en definitiva...

Hoy quería mostraros el último tutoríal que he preparado, la calabaza de Halloween, ¿no os parece una monada? Es pequeña como podéis apreciar por el tamaño en mi mano, con lo cual si os animáis a hacer unas cuantas, podéis hacer una guirnalda, o un par de pendientes como dice Elena.


Necesitaremos lana naranja, lana verde, ganchillo, guata para el relleno, un marcador, una aguja lanera y tijeras 


Comenzamos con un anillo mágico con seis puntos (6 puntos)



 Un aumento en cada punto (12 puntos)


 Un punto bajo y un aumento, y repetimos hasta el final de la vuelta (18 puntos)


 Dos puntos bajos y un aumento, y repetimos hasta el final de la vuelta (24 puntos)


 Tres puntos bajos y un aumento, y repetimos hasta el final de la vuelta (30 puntos)


 Cuatro puntos bajos y un aumento, y repetimos hasta el final de la vuelta (36 puntos)


 Cinco puntos bajos y un aumento, y repetimos hasta el final de la vuelta (42 puntos)


 Ahora hacemos un punto bajo en cada punto de la vuelta anterior (42 puntos)


Y repetimos durante tres vueltas más, es decir en estas cuatro últimas vueltas hacemos un punto sobre el de la vuelta anterior, y al terminar la cuarta seguimos teniendo 42 puntos.


Ahora cinco puntos bajos y una disminución (36 puntos)


Cuatro puntos bajos y una disminución (30 puntos)


Tres puntos bajos y una disminución (24 puntos)


Dos puntos bajos y una disminución (18 puntos)


Un punto bajo y una disminución (12 puntos)

En este momento rellenamos nuestra calabaza con la guata


Y cerramos haciendo seis disminuciones.


Cortamos el hilo pero dejando una hebra larga para hacerla pasar a través de la calabaza con ayuda de la aguja lanera, para darle la forma característica


Nos quedaría así


A continuación vamos a hacer el tallo.

Comenzamos haciendo un círculo mágico con seis puntos


A continuación hacemos un punto bajo y un aumento (quedan 9 puntos)


Ahora hacemos durante cinco vueltas un punto bajo sobre cada punto de la vuelta anterior.

En la siguiente vuelta hacemos un aumento en todos los puntos (18 puntos)


Y en la última vuelta, volvemos a hacer un aumento en todos los puntos (quedan 36 puntos)


Cortamos la lana dejando una hebra larga para coserla a nuestra calabaza


¿No os parece una monada? Animaos a tejer vuestras propias calabazas para la decoración de Halloween de este año. Yo ya estoy en ello. Y si os apetece podéis enseñárnoslas en Facebook. 

lunes, 19 de octubre de 2015

Excursión a Manchester

Ayer os contaba nuestro viaje familiar a Skipton para visitar Yarndale, y os comenté que a la vuelta nuestro avión salía del aeropuerto de Manchester, por lo que decidimos pasar allí la mañana viendo lo que nos diera tiempo. No estuvimos allí muchas horas, pero nos dio tiempo a dar una vuelta por el centro de la ciudad y a ver algunos sitios realmente preciosos. 

Buscando la catedral, nos topamos con The John Rylands Library. Esta biblioteca fue fundada por Enriqueta Rylands en memoria de su marido John. Está ubicada en un edificio gótico que fue diseñado en 1889 y abierto al público el 1 de enero de 1900.


Es una auténtica maravilla, no tengo palabras para describiros cómo nos gustan a Juan y a mí este tipo de bibliotecas, son lugares mágicos, en los que te sientes transportado a otra época, y que te hacen sentir un respeto hacia tanto como se ha investigado, trabajado y escrito, a la vez que te hacen sentir tan ignorante y con tanto por aprender. Igualmente a mí me gusta mucho la arquitectura civil por lo que como podréis ver en la foto, la visita tenía todos los ingredientes para dejarnos encantados.













A un lado de la sala de lectura se encuentra la estatua de la fundadora de la biblioteca, y justo enfrente, en el otro extremo, la de su esposo, en cuyo honor fue construida.



En la puerta hay un libro de firmas que invitaba a dejar escrito cuál era tu libro favorito. Por supuesto nosotros dejamos nuestra huella.


Luego yendo por la misma avenida en la que se encuentra la biblioteca, encontramos la catedral de Manchester. Se trata de un edificio medieval dedicado a Santa María, San Dionisio y San Jorge. También es muy bonita. Aquí os dejo algunas fotos para que la disfrutéis.






Manchester nos pareció una ciudad moderna, joven y muy comercial. En ella pudimos ver edificios muy modernos y vanguardistas junto a edificios antiguos y preciosos. Aquí os dejo algunas fotos de nuestro paseo, espero que os gusten.








Bonitas, ¿verdad? Ojalá podamos volver en otra ocasión para completar nuestro paseo, que en esta ocasión se nos hizo corto, y ver el resto de tesoros que guarda Manchester.