miércoles, 19 de junio de 2013

Las huellas del paso del tiempo

Este fin de semana he hecho una adquisición para mi nuevo taller. Mis padres han venido a pasar unos días a casa aprovechando que mi hija hacía su representación bianual de ballet y mi madre y yo hemos aprovechado para hacer una escapada a Ikea. Alli he encontrado este carrito y por una vez me he dado el capricho de regalármelo.

 
La verdad es que ya lo había visto en otras ocasiones, pero nunca me había animado a comprarlo, aunque creo que ha llegado en el momento preciso, ya que me va a servir para organizar el trabajo que estoy haciendo (tengo que reconocer que nunca había tenido entre manos un trabajo que requiriese tantos ovillos). Así que con el carrito puedo tener los ovillos que esperan a ser utilizados debajo del todo...
 
 
...mientras que en la bandeja superior tengo mi manta a medio tejer.
 
 
Y aprovecho el hueco del medio para otras cosas que tengo entre manos y que más adelante os iré contando.
 
 
Por cierto, a mi madre le ha gustado la manta que estoy haciendo. Tengo que contaros que ella es la que me enseñó a hacer ganchillo. Ante todo es una gran modista que lo mismo saca un patrón, que descose una prenda entera porque ha bajado de talla y la vuelve a reconstruir, como que cose una chaqueta, e incluso cosió los vestidos de novia mío y de mis hermanas (cada uno con un estilo diferente, y desde la nada, ideando ella misma el patrón, cortando las telas y cosiéndolos completamente); pero también la recuerdo desde pequeña haciendo ganchillo, mayormente tapetes de hilo blancos o beige, que luego iban cubriendo diferentes mesitas y muebles de la casa. Hace ya bastante tiempo que no teje ni cose nada, tantos años de trabajo le han desgastado los huesos tanto que este invierno finalmente le han tenido que operar para ponerle una prótesis que le devolviera movilidad a su mano izquierda. Aquí tengo la foto de lo último que tejió, un mantelito que adorna la mesa de centro de su casa y que realizó mientras pasaba unos días en casa cuando nació mi segunda hija, ayudándome hasta que yo consiguiera organizarme con la tarea de cuidar a los dos pequeños.

 
Aún así al ver la manta la cogió para dar algunos puntos....
 
 
Al ver sus manos en la foto y compararlas con las mías....
 
 
...se me ocurrió hacer la foto de mi hija haciendo como que también teje (ella quiere aprender pero aunque le pone voluntad todavía no consigue dominar la técnica de momento, aunque ya lo aprenderá ya...)
 
 
Parecen distintas versiones de las mismas manos, como en el pasado, en el presente y en el futuro... Espero tener tiempo y salud para hacer tantas y tantas cosas bonitas como mi madre ha tenido oportunidad de hacer.
 

domingo, 9 de junio de 2013

Una manta de ganchillo para regalar

De un tiempo a esta parte he descubierto diferentes sitios en internet sobre labores que además de ser un placer para la vista, son una fuente de inspiración, ya que en esto del ganchillo hay verdaderas artistas capaces de tejer lo que para mí son obras de arte. A la izquierda poco a poco iré compartiendo los blogs que sigo para que vosotros también podáis disfrutar de su vista y su lectura.
De algunos de ellos he sacado la idea de la manta que estoy tejiendo ahora. Es un regalo para mi hermana que desde hace bastante me viene pidiendo que le haga. Veréis estas fotos son del motivo que estoy utilizando...


Del blog de rosa p. [ handcrafting. postmodern.]


De Attic24

 
De lanasyovillos.com. Este último es ligeramente diferente, aunque también me sirvió para decidirme a elegir este

  
El caso es que mi hermana tiene una cama muuuuy grande, por lo que me he tenido que proveer de suficientes ovillos para no sufrir luego un cambio de tintada, ya que la manta es toda de un color

 
15 ovillos en total que poco a poco voy tejiendo con el ganchillo.

  
Como podréis imaginar este proyecto me llevará un buen tiempo además de por la medida, porque con el trabajo, la casa y la familia al final me queda poco tiempo para tejer, pero no importa porque poco a poco voy viendo como mi manta va creciendo
 
 

  
Hasta pronto, aquí me quedo tejiendo....

lunes, 3 de junio de 2013

Corpus Christi

Ayer fue la festividad del Corpus Christi.
Vivo en una pequeña localidad de la costa alicantina desde hace unos pocos años, y nunca había visto la procesión del Corpus. Algunas amigas me dijeron que adornan las calles y salen las niñas y los niños que han tomado su primera Comunión y que me gustaría, así que a eso de las seis de la tarde nos fuimos al centro del pueblo para ver qué se estaba preparando.


Y la verdad es que nos llevamos una bonita impresión al ver como la gente que vive en las calles por las que pasa la procesión adorna su trozo de calzada  con flores y hojas que ellos mismos han recolectado de sus jardines o que les han dado amigos o conocidos, unos de forma más elaborada, otros simplemente la cubren de flores al azar...

 
 
 
Cuando es la hora, suenan las campanas de la Iglesia y comienza la procesión. Delante los niños y quienes quieran acudir al acto, detrás la Custodia y finalmente las autoridades.
 


 
Bueno, lo cierto es que estos actos me emocionan, será por el fervor de la gente, por la liturgia o por la bonita música que tocaba la banda.
Pero el motivo por el que cuento esto en el blog es porque me llamó la atención que la gente adorna sus casas y balcones con colchas de ganchillo tejidas por ellos mismos a mano, o por sus madres y abuelas. Había verdaderas preciosidades y confieso que las fotos no hacen justicia a algunas de ellas. Me parece una buena forma de embellecer las casas. ¿Qué os parece a vosotros?

 

sábado, 1 de junio de 2013

Libros de ganchillo

Hoy hemos ido a la librería de Rosa a comprar un libro infantil.
Curioseando, curioseando he encontrado estos libros en la sección de labores



Se trata de dos libros para tejer flores y minifiguras de ganchillo que parecen sencillas de hacer. Me encantan estos libros, aunque no fuera capaz de tejer ninguna de ellas los amortizo con lo que me gusta mirarlos y mirarlos...
El caso es que Rosa no sabía que me gustan las labores y cuando se lo he dicho me ha hecho un regalo:





Se trata de un regalo promocional de la novela La lista de mis deseos, de Grégorie Delacourt. Consta de un pequeño cuadernillo en el que viene el comienzo de la novela acompañado de un kit de punto de cruz (tela, patrón e hilos incluidos).  Resulta que la protagonista de la historia regenta una mercería, de ahí el regalo. ¿A que es un bonito detalle? desde luego a mí me ha hecho muchísima ilusión. Muchísimas gracias Rosa!! :-)