Aprendiendo cosas nuevas

Hola de nuevo. Hoy os traigo algo diferente...

Tengo dos compañeras de trabajo que son muy aficionadas a la repostería creativa, a las tartas decoradas y las cupcakes. Como suele ocurrir con todas las personas que disfrutan con lo que hacen, da gusto oírlas hablar de los bizcochos, las tartas y todo lo que hacen para meriendas, cumpleaños, comuniones... y por supuesto, dan ganas de aprender a hacerlo una misma.

Los Reyes Magos le trajeron a mi hija estas pasadas Navidades un juego de repostería que es un primor, con sus moldes para decorar, su manga pastelera... en fin todo lo necesario (aunque no deja de ser un juguete) para la decoración de magdalenas o cupcakes propiamente dicho.

Ayer nos decidimos a probarlo y os voy a contar cómo nos fue.

Lo primero, claro, fue hacer las magdalenas. Yo no sé mucho de repostería, únicamente sé hacer bizcocho de limón que he visto hacer a mi madre toda la vida. La receta es mezclar en un bol 3 huevos, un yogurt, una medida del vasito de yogurt de aceite, dos de azúcar, tres de harina, un sobrecito de levadura y rayadura de limón, como véis, muy sencillo.

Y de ahí a los moldes de las magdalenas

y a verlas subir en el horno ¿notáis lo bien que huelen?

Mientras subían, fuimos preparando el fondant para la decoración. Mis sabias compañeras me recomendaron una panadería en la que fabrican ellos mismos el fondant y te lo tiñen del color que quieras, siendo más natural y sabroso al comerlo, y allí lo compré ¿os gustan los colores que elegimos?

Lo que hicimos fue aplanarlo con el rodillo y sacar con un vaso una fina capa para ir cubriendo todas las magdalenas y luego con la ayuda de los moldes más pequeños fuimos troquelando mariposas, flores, pájaros y corazones y fuimos decorándolas como mejor nos fue pareciendo ¿os gusta como nos quedaron?

Sé que no quedaron perfectas, pero teniendo en cuenta que es la primera vez que lo hacíamos y que los materiales que utilizamos no dejaban de ser juguetes, estamos satisfechas con el resultado, sobre todo porque lo pasamos fenomenal horneando, amasando, troquelando y decorando.

Estas cupcakes son celebrar el cumpleaños de Juan con sus amigos del club de lectura, espero que les gusten, cruzo los dedos...

Os dejo la más especial de todas, la favorita de mi hija, la ha hecho ella ¿a que es bien graciosa?

Da gusto aprender cosas nuevas. Aunque nos ha llevado mucho trabajo y Juan ya se las ha llevado para sus amigos, nos encanta mirar las fotos y disfrutar de nuestras cupcakes.

 



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